El Muncyt abre sus puertas a los centros de Voz Natura
Es ya toda una referencia en el mundo escolar gallego y en el de los museos en general. Es el Muncyt, el Museo Nacional de Ciencia y Tecnología. Y por ello, la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre y la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) activan, por 10º año consecutivo (el primero fue en el ya lejano curso 2012-13), el programa de visitas guiadas y obradoiros educativos a ese edificio que mira a las playas de Riazor, Orzán y Matadero. Unas visitas pensadas para todos, pero con un toque especial para los participantes en la actual edición de Voz Natura. En resumen, un clásico de éxito.
Está claro el porqué de esa invitación a los tres centenares y medio de centros que trabajan en esta iniciativa de La Voz de Galicia y la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre (y que cuenta con el apoyo de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivienda, la Diputación de A Coruña, la Fundación Alcoa, El Corte Inglés y la Fundación Ramón Areces). Y es que el Muncyt tiene entre sus objetivos el acercamiento de la sociedad a la ciencia a través de sus exposiciones y programas de actividades dirigidos a todos los públicos.
María Viña, su portavoz, recalca que el museo piensa constantemente en los más jóvenes, y que ahora mismo ofrece a los participantes en Voz Natura visitas guiadas y talleres educativos. Unas visitas que, además, pueden ser presenciales o virtuales, «pero a pandemia vai quedando atrás, temos todas as medidas de seguridade e apostamos polos obradoiros presenciais». Y lo explica: «Non só gustan máis, senón que o resultado é mellor, os rapaces fixan mellor os coñecementos».
Pensando especialmente en los alumnos de primaria que participan de Voz Natura, el Muncyt propone un auténtico desafío: ¿Cuáles son los elementos químicos que componen nuestro planeta? «Temos unha exposición dos elementos —añade María Viña—, e explicamos a orixe dos descubrimentos cunha linguaxe adaptada á cada idade».
Algunos de aquellos son necesarios para la vida, otros están en la tecnología que usamos a diario. La portavoz del Muncyt remarca un aspecto fundamental para ella: «Temos que facer un uso sustentable do que temos, non podemos quedármonos sen eses elementos». Y la actividad en el museo mostrará ejemplos de porqué hay esa necesidad de un uso sostenible. Por cierto que el abanico de posibilidades se abre mucho para los alumnos de la ESO y Bachillerato. Lo dicho: todo un desafío. Y muy grato y enriquecedor.
Está claro el porqué de esa invitación a los tres centenares y medio de centros que trabajan en esta iniciativa de La Voz de Galicia y la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre (y que cuenta con el apoyo de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivienda, la Diputación de A Coruña, la Fundación Alcoa, El Corte Inglés y la Fundación Ramón Areces). Y es que el Muncyt tiene entre sus objetivos el acercamiento de la sociedad a la ciencia a través de sus exposiciones y programas de actividades dirigidos a todos los públicos.
María Viña, su portavoz, recalca que el museo piensa constantemente en los más jóvenes, y que ahora mismo ofrece a los participantes en Voz Natura visitas guiadas y talleres educativos. Unas visitas que, además, pueden ser presenciales o virtuales, «pero a pandemia vai quedando atrás, temos todas as medidas de seguridade e apostamos polos obradoiros presenciais». Y lo explica: «Non só gustan máis, senón que o resultado é mellor, os rapaces fixan mellor os coñecementos».
Pensando especialmente en los alumnos de primaria que participan de Voz Natura, el Muncyt propone un auténtico desafío: ¿Cuáles son los elementos químicos que componen nuestro planeta? «Temos unha exposición dos elementos —añade María Viña—, e explicamos a orixe dos descubrimentos cunha linguaxe adaptada á cada idade».
Algunos de aquellos son necesarios para la vida, otros están en la tecnología que usamos a diario. La portavoz del Muncyt remarca un aspecto fundamental para ella: «Temos que facer un uso sustentable do que temos, non podemos quedármonos sen eses elementos». Y la actividad en el museo mostrará ejemplos de porqué hay esa necesidad de un uso sostenible. Por cierto que el abanico de posibilidades se abre mucho para los alumnos de la ESO y Bachillerato. Lo dicho: todo un desafío. Y muy grato y enriquecedor.